Vivir sin perturbarse en el amor

Hacía tiempo que había escuchado una charla y había dejado frases en un borrador, me hizo reflexionar acerca del motivo de porqué hay personas que te perturban por dentro y que son capaces de sacar un conflicto interno que ya estaba latente en ti.

Estuve una temporada conociendo a una persona con la que compartí mi vida, me impliqué en la suya y creábamos a veces una especie de proyecto de futuro. Al principio fue increíble, pero según pasaba el tiempo e interiorizaba lo que se suponía que era amor empecé a vivir con perturbaciones.

Me costó observar que el conflicto estaba dentro de mí, que estaba gastando una energía en el reflejo que menos me gustaba de mí misma. Pensaba que era mi maestro espiritual por así decirlo, y que gracias a la superación de dichos conflictos me convertiría en una persona mejor. Pero no era así, realmente es mi responsabilidad poner límites a lo que me apetece vivir o experimentar. 

Aquello que me hacía recelar de él era lo que más me molestaba de mí misma y fue una oportunidad muy buena para verme frente al espejo. Observar la ira, el desprecio, la confusión, el egoísmo, la manipulación, el deseo, el miedo,... y sin juzgar... apartarme. 

Comprender que al final llega un momento en el que solo tú puedes cambiar tu situación, solo tú puedes decir no y dejar de mentirte a ti misma. 

Me perturbaban muchas cosas de él. Pero la solución no era seguir con él. Si no tocar hondo, mirar a tu alrededor y darte cuenta de que es momento de empezar tu vida de nuevo. Levantarte del suelo y acto seguido cerrar una puerta con todas tus fuerzas que jamás volverás a abrir.

Y a seguir, libre. 

Hacía mucho que no sentía ese amor por mí misma y a veces tienes que vivir tormentas así para valorar con más ahínco la calma y la tranquilidad.